energia-eolica

En los últimos años ha quedado demostrada la importancia de las energías renovables para luchar contra el cambio climático e iniciar la transición hacia un modelo energético más sostenible y limpio. Su crecimiento es imparable y cada vez más competitivo.

En este blog te enseñamos qué tipos de energías renovables existen y cuáles son sus características, pero primero veamos qué son exactamente.

Las energías renovables

Las energías renovables, también denominadas energías alternativas o verdes, son fuentes de energía que proceden de recursos naturales, como el sol, el agua, el viento o la biomasa vegetal o animal. Su impacto medioambiental es mínimo, ya que no producen gases de efecto invernadero ni emisiones contaminantes, y son inagotables o con capacidad para de renovación, encontrándose en cualquier parte del planeta.

Características

  • Son beneficiosas para el medio ambiente: no generan residuos y su impacto es muy bajo. Por ello, nos ayudan a luchar contra el cambio climático y a cuidar de nuestro entorno.
  • Son fuentes de energía ilimitada, no se agotan con su consumo.
  • Se pueden encontrar en cualquier lugar, ya que proceden de fuentes naturales. Esto ayuda a generar energía propia y a ser autosuficiente. Además, también contribuyen al autoconsumo.

Tipos de energías renovables

Energía eólica

Es la energía que se obtiene del viento. La fuerza del viento genera energía cinética, obtenido por el movimiento que provoca al mover las palas de los autogeneradores. Los molinos de viento se encuentran en parques eólicos, muchos ubicados en el mar, ya que el viento es más estable frente a él (aunque se incrementa el coste de construcción por su complejidad).

Energía solar

Se obtiene del sol, aprovechando la radiación electromagnética mediante células fotovoltaicas, colectores solares o heliostatos. Se subdivide en tres tipos:

  • Fotovoltaica: absorbe la radiación solar a través de placas solares y la transforma en electricidad, la cual puede ser almacenada en baterías, volcada en la red eléctrica o consumir directamente.
  • Térmica: aprovecha el calor del sol y se utiliza para climatizar edificios, calentar agua y otras aplicaciones industriales.
  • Termoeléctrica: usa la radiación solar para calentar un fluido hasta generar vapor a presión con el que se genera electricidad.

Energía hidráulica

También denominada hidroeléctrica, se obtiene de los ríos y corrientes de agua dulce, usando la fuerza del agua para generar energía eléctrica, normalmente en presas. De esta forma, la fuerza del agua hace girar una turbina conectada a un transformador, generando energía eléctrica.

Aunque su costo es bajo, se necesita una inversión en la construcción de una central hidroeléctrica, formada por una presa, un embalse y una central.

Energía geotérmica

Aprovecha la energía calorífica del interior de la tierra, generando energía a través del calor.

Energía mareomotriz

Se obtiene de las mareas, aprovechando su movimiento para generar energía. No debe confundirse con la energía undimotriz u olamotriz, que produce energía por medio de la fuerza de las olas. Funciona de manera similar a las turbinas eólicas, instalando generadores.

Biomasa y biogás

La biomasa es la energía que se extrae de la materia orgánica, tanto vegetal como animal, y consiste en la combustión de productos biodegradables como serrín o cortezas. Esta energía puede transformarse para obtener energía térmica o calor, electricidad o energía mecánica (biocarburantes). Para conseguir biogás, primero necesitamos la biomasa.

El biogás es un gas compuesto por metano y dióxido de carbono en proporciones variables, dependiendo de la composición de la materia orgánica de la que se ha creado. Los residuos ganaderos y agroindustriales, los lodos de plantas de tratamiento de aguas servidas, los residuos sólidos urbanos de rellenos sanitarios y vertederos y las plantaciones energéticas conforman el sustrato orgánico. Esta energía puede ser utilizada como carburante y tener aplicaciones eléctricas y térmicas.

Otras energías

  • Bioetanol: es un combustible orgánico para la automoción. Se consigue por medio de un proceso de fermentación de productos vegetales.
  • Biodiésel: otro combustible orgánico para automoción (entre otras aplicaciones), obtenido por un proceso de refinado de aceites y grasas vegetales.
  • Hidrógeno verde: una alternativa muy prometedora a los combustibles fósiles, se puede producir de muchas formas, siendo la más interesante la electrólisis del agua, a partir de fuentes de energía renovables.

Como puedes observar, existen muchos tipos de energías renovables, por los que cada vez se apuesta con más seguridad y ven reducidos sus costes. Puedes obtener más información sobre este tema en las páginas del AIE (Agencia Internacional de la Energía) y de IRENA (Agencia Internacional de las Energías Renovables). Mientras, si tienes alguna duda, puedes contactar con nosotros. ¡Estamos a tu disposición!

0
Comments

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *